Comedia sin título, crítica teatral

18 Nov 2021

Se oyen unas fuertes respiraciones desde la caja escénica del Teatro María Guerrero, sede del Centro Dramático Nacional, un momento antes de que el imponente telón plateado que nos dió la bienvenida al acomodarnos en nuestras localidades, caiga bruscamente al suelo, despareciendo de forma rápida de la escena, fagocitado a través de una pequeña compuerta en el piso del escenario que ya anticipa el intenso recurso que se hará, en esta propuesta, tanto del foso como del cuarto de trampas, con los interpretes apareciendo y desapareciendo a través de esos espacios.

Comedia sin titulo, crítica teatral

El naranja es el color que todo lo impregna en la escena, suelos, paredes, focos, altavoces, etc… que se irá combinando con elementos de vestuario en fucsia, magenta, salmón o en dorado, emitiendo una de las señas de identidad de los proyectos abordados por Marta Pazos, creadora de Voadora, siempre marcados por una fuerza visual magnética.

“El poeta os va a enseñar, esta noche, un pedazo de realidad” …”el poeta os hace una encerrona”

parejaEn esta ocasión, en la particular versión de “Comedia sin título”, la obra inacabada que dejó Federico García Lorca, interrumpida por la muerte del poeta, fusilado, en un paraje de su natal provincia de Granada. La dramaturgia de esta propuesta es firmada por José Manuel Mora y la propia directora, Marta Pazos, quien manifiesta al respecto que han huido del intento de completar su texto, “optando por mostrar su carácter inconcluso y su potencial creativo como si de una herida se tratase; frente al impulso racional que tiende a clausurar el sentido de la pieza, hemos optado por exhibir la herida e indagar en su potencial creador, en su poder subversivo”.

El texto que Lorca dejó escrito se corresponde con el primer acto, que en esta recreación se titula “En el teatro” en el cual el protagonismo está en la palabra, con las célebres frases de “El poeta os va a enseñar esta noche un pedazo de realidad”, “…hoy el poeta os va a hacer una encerrona”, “…me molesta el artificio del teatro”, “…la única ley del teatro es el juicio del espectador”, “…ver la realidad es difícil y enseñarla mucho más” o la celebérrima “¿Por qué hemos de ir al teatro para ver lo que pasa y no lo que nos pasa?” que aquí Lorenzo, director teatral convertido en personaje, dirige al público desde el proscenio, siendo interrumpido, por una peculiar pareja en una real irrealidad, tocada por los tonos cromáticos habituales de Marta Pazos, quienes desde un palco increpan al director/autor a quienes éste les espeta: “¡no me interrumpan!”, a lo que uno de ellos le responde: “¡tengo derecho, he pagado mi butaca!”.

“La única ley del teatro es el juicio del espectador”

Los actos II y III, en esta ocasión, son titulados “En la morgue” y “En el cielo, la palabra cederá el protagonismo al cuerpo en el segundo, y Lorenzo dejará paso a que sea el propio Federico quien protagonice lo que sucede en la escena, mientras que en el tercero se apuesta por la estética para la recreación del espíritu, siendo la propia Marta Pazos, quien recoge el testigo, de Lorenzo en el acto I y Federico en el acto II, hciéndose presente aún sin pisar el escenario, salvo para recoger los aplausos de la ovación final junto con todo el elenco.

Comedia sin titulo, crítica teatral

Estupendas prestaciones de todo el equipo técnico, con Max Glaenzel en la escenografía; Nuno Meira exigido en una comprometida iluminación, donde se da mas protagonismo a la luz, y además intensa, que a las sombras; Guillermo Weickert dirigiendo los movimientos de una trabajada coreografía, Rosa Tharrats creadora de un original vestuario que sabe sacar provecho del mejor elemento utilizado con total naturalidad, que son los desnudos, protagonistas de toda la propuesta, sobre todo en el acto II, componiendo bellas creaciones dentro de la impactante fuerza visual de la propuesta. Música original de Hugo Torres.

“¿Por qué hemos de ir siempre al teatro para ver lo que pasa y no lo que nos pasa?”

Comedia sin titulo, crítica teatral

Los catorce protagonistas cumplen con el requisito que le fue solicitado por el actual director del CDN, Alfredo Sanzol, a Marta Pazos cuando le encargó el proyecto, cual fue que todos ellos fueran menores de treinta años, y están magníficos, acreditando sus capacidades multidisciplinares tanto en interpretación, como para el baile, como con distintos instrumentos musicales, llenando la escena de una energía contagiosa: Georgina Amorós, Marc Domingo, Alejandro Jato, Cristina Martínez, María Martínez, Clara Mingueza, Koldo Olabarri, Mabel Olea, Carlos Piera, María Pizarro, Chelís Quinzá, Luna Sánchez, Paula Santos y Camila Viyuela.cartel

Es innegable que Marta Pazos quiere hacer…y hace muchas cosas, algunas con resultados sobresalientes como la coreografía que da inicio al acto II, en la morgue, con todos los intérpretes sobre la escena sorprendiendo y emocionando, y otras no tan redondas, pero siempre llamativas, como la utilización de la bandera y la forma en que aparece en escena.

“Han dado luz de luna y quiero hacerte la escena final”

Notable aproximación a la inconclusa pieza de Federico García Lorca, quizás la primera obra del teatro contemporáneo español, en la que se experimenta con el mapa sensorial y de referencias que le fue propio al poeta, desde la cicatriz, a la Luna, como a la  palabra y al cuerpo, especialmente al cuerpo desnudo como expresión máxima, y más pura, de belleza. De impactante fuerza visual, aunque no todos los giros que se quieren sugerir sean decodificados adecuadamente en el patio de butacas, pero déjense llevar y disfruten.

 

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Comentarios

  1. toñomenendez dice: diciembre 8, 2021 at 10:34 pm

    Una propuesta interesantísima que toca muchas cosas aunque de manera fragmentaria. Salvo el texto del primer acto, que es pura poesía de la última época de Lorca, y el segundo que trata de expresar su imaginario y el que nos ha dejado el poeta, el tercer acto es el menos comprensible y más propenso a la interpretación. Los actores , todos muy jóvenes, soberbios, tanto en expresividad verbal como corporal. Por último, decir que varias personas se salieron de la sala durante la representación, lo cual más que molestar, terminaron dando razón y vigencia a la propuesta de Lorca, quien ya anticipa y escenifica el malestar del espectador que exige no escuchar lo real y se va nada más empezar la representación.

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