El Abrazo, crítica teatral

30 Abr 2021

En la multitudinaria concentración de un centro comercial en los días previos a la Navidad, dos personas pertenecientes a lo que se denomina ‘tercera edad”, un hombre y una mujer, buscan regalos, ella para su nieto Lucas, aunque realmente se trata de su sobrino nieto, él para alguno de sus nueve nietos. Se hablan en una convencional conversación, cruzan sus miradas y, de repente, sus recuerdos vuelven a cuarenta y cuatro años y dos meses atrás, a la noche de un seis de octubre en que Juan dejó de tocar el ‘chelo” para siempre… ¿Rosa?, ¿Juan?…¡estás igual!, ¡no digas eso, tú sí que estás igual!.

El Abrazo, crítica teatral

Tras unos instantes de miradas llenas de emoción se funden en un abrazo, del que toma nombre (“El Abrazo”) la obra teatral escrita por Christina Herrström (1959, -Estocolmo- Suecia), que Magüi Mira vio representada por una compañía teatral francesa en el contexto del Festival Internacional de Avignon, con gran éxito de público.

¿Qué sucede cuándo dos amantes se reencuentran tras haber pasado toda una vida, desde la última vez que se vieron?

El Abrazo, crítica teatralY los hados se han cruzado para que esta obra se represente esta primavera, en el Teatro Bellas Artes, de Madrid, producida por Pentación Espectáculos, dirigida por quién la descubrió en Avignon.

La propuesta da su respuesta particular a lo que sucede cuando dos amantes se reencuentran, cara a cara, más de cuarenta años después de haberse visto por última vez, lo que en palabras del personaje Juan supone no que haya pasado mucho tiempo, sino que ha pasado toda una vida.

“Nosotros ahora tenemos que decirte que no…”

Tras el inesperado reencuentro de los amantes, el deseo compartido de haber tenido un hijo en común toma carne y Rosa recibe en su casa una visita sorprendente, que la dramaturga sueca presenta entre la fantasía y el hiperrealismo siempre imperante en los textos de autores nórdicos.

Una escueta escenografía, compuesta por dos paneles colocados en ángulo en el fondo de la escena, además de un pequeño sofá y una mesa, es hábilmente iluminada por el buen oficio de José Manuel Guerra, que convierte los paneles en translucidos, en momentos puntuales, para mezclar la realidad con la fantasía.El Abrazo, crítica teatral

“Venden ‘drones’ de juguete, rebajados …¡como nosotros, de saldo!”

María Galiana desempeña el papel de Rosa con su habitual naturalidad, frente a un más que correcto Juan Meseguer que adorna su personaje de Juan con tintes marcadamente de comedia, muy pegado al pragmatismo más extremo. Jean Cruz en su metafórico rol, incide, en exceso, en un cierto infantilismo. 

La obra escrita por Herrström que sirve de base a esta propuesta plantea, cara a cara, lo que podía haber sido, frente a lo que realmente fué. ¿Es mejor tener sueños para recordarlos cuando lo decidamos?, ¿o abalanzarnos en busca de lo que, quizás, solo ocurre en nuestra fantasía?, La respuesta adecuada corresponderá a cada espectador …y a sus propias experiencias.

 

Si alguna de las imágenes utilizadas en este blog, está protegida por copyright, ruego me lo hagan saber para ser retirada de forma inmediata.

 

Share

Comentarios

  1. La acabo de ver en santander. Aburridísima. Diálogos que no llevan a ninguna parte. Hemos agradecido que no llegara a durar una hora-aunque nos habían formado que la obra duraba 90 minutos. Los actores han hecho lo que han podido.

  2. Yo también la acabo de ver en Cádiz, no doy crédito a como se puede llevar al teatro algo así, los actores no son culpables lo hacen lo mejor que pueden, la obra es simple, sin sustancia, sin mensaje, es una tomadura de pelo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.